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Turismo respetuoso con el urogallo cantábrico

Panel informativo en la Sierra de los Ancares
Fecha: 
Viernes, 22 Julio, 2016

La cordillera Cantábrica atrae en verano a miles de turistas en todas sus vertientes. La actividad turística y de ocio no debería ser un problema para el urogallo cantábrico, si se toman una serie de medidas para limitar las molestias que este tipo de actividades pueden provocar en  áreas con presencia de urogallo.
 
Estas sencillas recomendaciones se recogen en la guía Turismo de montaña, actividades recreativas y conservación del urogallo cantábrico, que se ha publicado en el marco del proyecto LIFE+ Urogallo cantábrico. En este documento se ofrecen pautas para la gestión de las actividades turísticas y recreativas en la montaña cantábrica que sean compatibles con la conservación del urogallo cantábrico en cualquier época del año.
 
Durante los meses de verano, hay que tener especial cuidado debido a la posible presencia de hembras incubando o con pollos. Es un momento delicado y, por lo tanto, deben evitarse molestias en las áreas críticas para el urogallo.
 
En caso de practicar senderismo, se recomienda transitar siempre por caminos marcados. Si está cerrada al paso alguna pista forestal o camino, se deben respetar las indicaciones y buscar otra zona por la que transitar.  Aquellos que vayan acompañados de perros, deben llevarlo siempre atado para evitar provocar molestias a la fauna silvestre, especialmente al amenazado urogallo.
 
Antes de iniciar cualquier actividad en un espacio protegido, es preciso informarse acerca de su plan de uso y gestión, así como de la zonificación y restricción de accesos. Estas competencias corresponden a las comunidades autónomas. Castilla y León, Cantabria y el Principado de Asturias son las implicadas en la conservación del urogallo en la cordillera Cantábrica.
 

Información sobre el urogallo

 
Los turistas que visiten la cordillera Cantábrica durante este verano también encontrarán paneles informativos sobre esta especie emblemática y el LIFE+ Urogallo cantábrico en las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) donde actúa el proyecto.