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Entra en vigor el Plan de Recuperación del urogallo en Cantabria

Fecha: 
Monday, 20 October, 2014
cantadero en Camaleño @Javier Espinosa

El pasado 2 de octubre se publicó en el boletín oficial del Gobierno de Cantabria el decreto 52/2014, de 18 de septiembre, por el que se aprueba el Plan de Recuperación del urogallo cantábrico (Tetrao urogallus cantabricus).

En Cantabria, al igual que en el resto de la cordillera Cantábrica, se ha producido una fuerte regresión de la especie desde el año 1982 hasta nuestros días, pasando de los 13 - 21 machos en 5 áreas de canto en la década de los años ochenta, a los 4 ejemplares, como mínimo, en 3 sectores, en el año 2013. Por lo tanto, la población de urogallo en Cantabria ha ido desapareciendo de este a oeste, quedando recluida prácticamente al entorno del Parque Nacional de Picos de Europa.
 
El origen de su desaparición no está científicamente probado, aunque probablemente son las causas globales, como es el cambio climático, pero también una serie de factores locales que pueden haber afectado a la especie entre los que cabe destacar la modificación del hábitat por ungulados silvestres; los efectos antagónicos de la evolución del medio forestal sobre la calidad del hábitat debido al abandono del medio rural; el efecto de los depredadores; las molestias durante el celo, y, como consecuencia, la nula tasa de reclutamiento juvenil.
 
Durante el último año, se han realizado sondeos estimando la presencia de 4 ejemplares repartidos en 3 sectores, Camaleño-Vega de Liébana, Polaciones y Tresviso, separados entre sí por varias decenas de kilómetros. En los últimos años se han detectado hembras de urogallo fuera de las áreas habituales de campeo – Saja y Cabezón de Liébana –que atiende a un patrón de dispersión propio de la especie cuando los parámetros poblacionales se encuentran en niveles muy bajos.
 
El Gobierno de Cantabria pretende recuperar la población del urogallo en la Comunidad Autónoma hasta los niveles de 1982, cuando se conservaban 20 ejemplares. También se pretende mejorar su hábitat e incrementar el número de áreas de canto ocupadas por esta ave en la región.
 
La finalidad de este Plan de Recuperación es reducir el grado de amenaza que pesa sobre el urogallo mediante el impulso de medidas que favorezcan su estado de conservación y faciliten la viabilidad de la población a largo plazo. En concreto, las actuaciones se encaminan a mejorar el éxito reproductor y la supervivencia de los adultos, disminuir la mortalidad no natural de la especie, establecer un programa de cría y crear una reserva genética. Se pretende garantizar también la conservación de los hábitats favorables y promover actuaciones de restauración de los mismos; asegurar la conectividad entre núcleos de población; aumentar el conocimiento de la especie, la conciencia social e incrementar la participación pública.
 
El ámbito de aplicación del Plan de Recuperación se compone de cuatro zonas: Tresviso, Peñarrubia, Camaleño-Vega de Liébana y Polaciones-Palombera-Bárcena Mayor. El plan declara tres áreas críticas para el urogallo cantábrico, Camaleño, Tresviso y Vega de Liébana, que se consideran áreas vitales para la supervivencia y recuperación de la especie, incorporando los enclaves más importantes de refugio invernal, alimentación, área de canto y reproducción.
 
El Gobierno de Cantabria participa como socio beneficiario en el LIFE+ Urogallo cantábrico: el proyecto, coordinado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, tiene como objetivo fundamental frenar el declive de esta subespecie exclusiva del Noroeste de la Península Ibérica y fomentar su recuperación. Cofinanciado al 50% través del programa LIFE+, instrumento financiero de la Unión Europea para el medio ambiente, cuenta como socios también con las Comunidades Autónomas del Principado de Asturias y Castilla y León, esta última a través de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León; el Consorcio Interautonómico para la Gestión Coordinada del Parque Nacional de los Picos de Europa; Tragsa y Tragsatec, SEO/BirdLife y con la financiación del Organismo Autónomo Parques Nacionales y la Fundación Iberdrola.